‘Black Panther: Wakanda Forever’ muestra los límites de Marvel: sin protagonista original, la franquicia cae
De un modo similar a como pasa en la película, 'Black Panther: Wakanda Forever' es incapaz de superar la ausencia del primer Pantera Negra, Chadwick Boseman, fallecido debido a un cáncer de colon en agosto de 2020. Esta secuela se pasa buena parte del metraje hablando de lo insustituible que es Pantera Negra para acabar sustituyéndolo sin muchas ganas y con resultados que corroboran que quizás habría dejado aquella película como un experimento aislado.
Pero claro: para agosto de 2020 la maquinaria de Marvel ya se había puesto en marcha y el guión de la secuela estaba parcialmente escrito por el director y guionista de la primera entrega, Ryan Coogler, y con la casi totalidad del reparto original dispuesto a volver. Quizás la solución más racional habría sido la de cancelar el proyecto, pero Marvel tiene con Pantera Negra a un héroe militantemente racial, y los excelentes resultados en taquilla de la primera película dejaban claro que era un camino que convenía explotar. Era eso o Power Man.
¿El experimento podría haber funcionado? Sin duda, pero reconstruyéndolo de cero, es decir, con un reboot (que, en cualquier caso, era muy pronto para plantear: se sabe que Marvel pensó en enfundar a un nuevo actor en el traje de Black Panther, pero el riesgo de rechazo del público era demasiado alto). Para continuar la historia había que hacer un traspaso del manto del héroe, y estaba el precedente de que Shuri (Letitia Wright) ya lo había portado en los comics.